El año pasado tomé un taller de novela corta en el Fondo de Cultura Económica en Bogotá. Fue una experiencia fabulosa. Conocí autores que nunca había escuchado nombrar, y cumplí el reto de escribir mínimo mil palabras diarias durante el tiempo que duró el taller, con el fin de enseñarnos la disciplina que uno debe tener como escritor.
El objetivo, lograr tener un manuscrito (que es el primer borrador de un texto, no apto para publicar porque requiere muchas correcciones y esas cosas) que sería evaluado por un jurado para premiar los tres mejores. De los veintitantos que asistimos, no quedé de nada, lo cual -debo admitir- fue un golpe bastante duro a mi autoconvencimiento sobre mi talento como escritora... Pero el texto está ahí, son 32 mil 412 palabras, 58 capítulos -cortos claro está- y si bien me gustaría que se convirtiera en un libro, no tengo los medios, ni el conocimiento para hacerlo. Por lo tanto, he decidido publicarlo en este espacio, que también es de ustedes.
Pero para hacer esto más divertido, publicaré por partes la historia, pero solo cuando la parte más reciente logre 300 visitas -espero que no hagan trampa ;)-. Así, hacemos de esto un esfuerzo colectivo.
Espero que les guste este experimento...
Un abrazo,
Naty
Recuerda que todo es cuestión de puntos de vista... La realidad es relativa... Por eso trata de divertirte con lo que aquí encuentres, o quizá reflexiona un poco sobre los temas planteados. Nada aquí es absoluto porque solo escribo sobre CÓMO VEO LA VIDA Y OTRAS SIMPLICIDADES
Eheheheheeeee... Que felicidad, El mejor regalo! :D :D
ResponderEliminarAtt: M.G. =')
Estaremos a la espera del momento en que lleguen y así deleitarnos con esas letras
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